Marcar con una línea es un proyecto de interacciones y acciones sociales. Busca incrustar subversivamente un sistema de ciclovías mediante el delineado de las principales avenidas del centro de la ciudad. Por medio de la demarcación se evidencia la ausencia de una infraestructura urbana inteligente y se actúa políticamente frente a ella, promoviendo la apropiación del espacio público y la manifestación ciudadana de un deseo colectivo. El proyecto, dada su naturaleza, es a la vez una cadena de procedimientos y colaboraciones. Implica, entre otras acciones, el desarrollo de una maquinaria de baja tecnología que se adhiere a las bicicletas y permite delinear conforme se pedalea. La obra tiene como segundo componente un taller de producción de esta maquinaria con el fin de multiplicar el efecto, en conjunto con la creación de un manual impreso y un video para la autoproducción de la obra. Todas acciones que serán desarrolladas en colaboración con agrupaciones de ciclistas.
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